El hecho de trabajar para la administración pública no nos asegura que nos concedan un préstamo rápido, pero lo cierto es que los trabajadores públicos son uno de los colectivos preferidos por los bancos y son, por tanto, los que más posibilidades tienen de conseguir financiación. Estas son las razones por las que los funcionarios reciben un mejor trato por parte de las entidades financieras:
Estas favorables condiciones de funcionario sirven en menor medida a la hora de solicitar mini créditos rápidos. Necesitar un crédito rápido suele ir de la mano con tener un perfil de riesgo más elevado de lo habitual por el simple hecho de solicitarlo. Ahora bien, si demostramos que somos solventes y que se trata de un simple desajuste financiero o de un imprevisto puntual que no esperábamos, no habrá problema para conseguir la financiación.
Los requisitos que imponen los prestamistas a los funcionarios son exactamente iguales a los que deben cumplir el resto de prestatarios, independientemente de su situación laboral. No obstante, al contar con una fuente de ingresos más estable, los trabajadores de la administración pública tienen más opciones de obtener créditos.
A continuación, podremos comprobar los requisitos que debemos cumplir para conseguir préstamos para funcionarios:
Aparecer en un fichero de morosidad nos puede cerrar muchas puertas si necesitamos financiación, especialmente con los créditos de grandes importes. No obstante, podemos recurrir a los préstamos con ASNEF que ofrecen algunas compañías de capital privado, aunque no suelen ser de cantidades muy elevadas. En este caso, para tener acceso a estos mini créditos, debemos cumplir dos requisitos extra: la deuda no puede superar, por lo general, los 500 euros y tampoco puede estar vinculada a un producto o servicio relacionado con entidad bancaria tradicional.
Al pedir préstamos para funcionarios a una entidad bancaria o a una entidad financiera de crédito será necesario aportar ciertos documentos para demostrar que somos aptos como beneficiarios de esta financiación. Si acudimos a nuestro banco habitual, esta documentación será menor, pues ellos ya disponen de la información necesaria y conocen nuestro historial financiero. En caso contrario, estos son los documentos más habituales que nos requerirán:
Sin embargo, si pedimos un préstamo a nuestra entidad bancaria, no tendremos que entregar muchos de estos documentos, puesto que nuestro banco ya dispondrá de ellos. En el caso de las entidades de capital privado, el proceso de solicitud cada vez es más sencillo y breve, ya que han incluido diferentes servicios que nos permitirán agilizar el proceso.
Un claro ejemplo de esto es Instantor, ya que con esta herramienta podemos validar nuestros datos automáticamente con el prestamista sin necesidad de enviar papeles y en cualquier momento. Con la guía «10 claves para elegir un préstamo personal» mostrada a continuación, podremos ampliar gratuitamente la información con la finalidad de conseguir que nuestra petición sea de lo más exitosa posible.